Trabajar en tiempos de cuarentena

Preparando la vuelta al trabajo. Foto: Gustavo Valdez

Miles de españoles han transformado sus jornadas laborales para poder sobrellevar el confinamiento 

Marcela Gallego se levanta, como cada día, para ayudar a su hija a prepararse para asistir a clase. Desde que el pasado 14 de marzo se decretara el estado de alarma su rutina ha cambiado mucho, pero su hija, de solo cinco años de edad, ya se ha acostumbrado a ver a su profesora a través de una pantalla de ordenador. Su trabajo a tiempo completo y sin apenas horas de descanso es uno de los más infravalorados y más necesitados durante esta cuarentena: es ama de casa

“Mi esposo teletrabaja durante toda la semana, recibe llamadas a cualquier hora del día y yo estoy la mayor parte del tiempo atendiendo a la pequeña o recogiendo la casa”, explica Gallego. Antes de ser ama de casa se dedicaba a la venta inmobiliaria en Cullera, un pequeño pueblo al sur de la costa valenciana, pero lo dejó el año pasado para pasar más tiempo con su hija. “El inicio del confinamiento fue lo más duro, tenía un horario que se desmoronó, empecé en marzo una formación en el mundo digital para madres que quieren realizar su trabajo desde el hogar, pero con la peque he tenido que acomodarme a sus necesidades”, confiesa. 

La hija de Marcela recibiendo clases en tiempos de cuarentena. Foto: Marcela Gallego

En el último año, el número de hombres que se dedican únicamente a las labores del hogar ha superado los 300.000 pero las mujeres siguen en cabeza con más de tres millones, según la Encuesta de Población Activa publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Y, aunque el confinamiento esté impidiendo a muchas familias salir de casa, las tareas y el cuidado del hogar continúan recayendo en ellas. “Me levanto a las 5:30 de la mañana para poder tener tiempo de seguir mis clases virtuales y preparar el desayuno, luego a las 9:00 Daniela empieza sus clases con el ordenador y tengo que acompañarla hasta las 13:00 porque se distrae muy fácilmente”, explica la madre. “Pero a pesar de todo, mi hija está llevando muy bien la cuarentena, lo único que no quiere es ponerse una vacuna cuando todo esto acabe”, comenta entre risas. 

Autónomos asfixiados 

Los primeros meses de este 2020 no tienen precedentes, según la última Encuesta de Población Activa publicada por el INE: “La ocupación ha bajado en 285.600 personas en el primer trimestre pero hay que tener en cuenta que esta cifra no incluye a los afectados por un ERTE”, ya que a estos últimos se les considera “ocupados” si su inactividad no va más allá de los tres meses. Gustavo Valdez es dueño de una serigrafía en Palma de Mallorca y agradece que su único trabajador finalizó su contrato laboral una semana antes del estado de alarma. 

Como él, miles de autónomos han tenido que paralizar sus trabajos debido a la crisis del coronavirus y uno de los sectores más preocupados en Mallorca es el del turismo. “Un amigo mío tiene hasta siete empleados en su plantilla y a todos ha tenido que hacerles un ERTE”, explica Valdez. En su opinión el Gobierno no ha dado ninguna ayuda útil, “la cuota de autónomo más alta de Europa la tiene España y lo único que han hecho es retenernos el IRPF un mes más”, se lamenta. 

Para beneficiarse de las ayudas, los autónomos deben acreditar que sus ingresos del último mes han bajado un 75% respecto al anterior. “A mí no me permitieron cobrar la ayuda el mes pasado porque tuve un ingreso la semana antes del estado de alarma”, explica el serígrafo. 

En primera línea 

Mientras unos tienen que trabajar desde sus establecimientos y otros pueden permitirse trabajar desde casa, hay quienes lo hacen a pie de calle para ayudar a que todo pueda seguir con normalidad durante esta cuarentena. Adrián Gracia, un joven zaragozano, trabaja para la empresa de Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) desde hace dos años como operario de limpieza vial o como él mismo prefiere denominarse: “barrendero, es mucho más romántico”. 

Equipo de limpieza de la ciudad de Zaragoza. Foto: FCC

El joven, que compagina su oficio con sus estudios en la Universidad de Zaragoza, explica que con el confinamiento no se ha dado casi ningún cambio en su sector laboral. “Nos han reducido cuarenta minutos de la jornada pero nuestra nómina es la misma”, cuenta Gracia. Para el joven, las medidas de seguridad de la empresa llegaron un poco tarde, “la primera semana de cuarentena no teníamos guantes ni mascarillas, pero ahora podemos venir desde casa con el uniforme puesto para no tener que entrar en los vestuarios”, explica. 

Hasta el mes de marzo los trabajadores de FCC Parques y Jardines de Zaragoza estuvieron en huelga para conseguir unas mejoras salariales y finalmente llegaron a un acuerdo con la empresa. “Estoy muy orgulloso de su labor, estuvieron 58 días en huelga y se lo merecían, nuestro sector está muy infravalorado y tampoco nos alzamos todo lo que deberíamos”, añade Moros. Aun así, se siente orgulloso de la labor profesional que realiza, “no son buenos tiempos para nadie, a nosotros nos ha tocado servir a pie de calle y al menos de manera directa podemos ayudar a nuestra comunidad para, más bien pronto que tarde, se pueda volver a la normalidad”.

Por Viviana Calero

1 Comment on Trabajar en tiempos de cuarentena

  1. Arturo Beia Ruiz // mayo 29, 2020 en 10:00 pm // Responder

    Es posible que tengamos que adaptarnos a una realidad incierta respecto al mundo laboral. Ojalá que esto no afecte a los de siempre y beneficie a los de siempre, aunque cuando leo que hay gente que se esfuerza en sus diferentes perfiles tengo algo de esperanza de que pueden las cosas ir bien.

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  1. Nuevas normalidades

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