Creer para crear
Numerosas personas han unido su talento y oportunidades para hacer tecnología capaz de mejorar el futuro de quienes sufren alguna discapacidad.
Arte y tecnología, pasión y compromiso. Con estas palabras podríamos definir el trabajo de Makeroni, una asociación sostenida por cinco amantes de la tecnología en un barrio de Zaragoza. Lo extraordinario del caso es que estos ingenieros han demostrado que con muy poco se puede llegar hasta la NASA.
Con ‘Eye of Horus’ se dieron a conocer a nivel internacional. No fue su primer invento, pero sí el que les dio mayor difusión. Se trata de un wearable (tecnología que se lleva puesta) inalámbrico que permite a través de los movimientos de los ojos mover y encender objetos.

Parte del equipo de Makeroni en Cabo Cañaveral.
Su utilidad atrajo a ingenieros de la NASA que lo vieron útil para los astronautas. En 2015 Luis Antonio Martín Nuez, Rubén Martín, José Luis Berrocal y Fergus Reig se hicieron con el primer premio del concurso internacional Kennedy Space Center dotado con un viaje a las instalaciones de la NASA en Cabo Cañaveral para ser testigos del lanzamiento de un transbordador. Esto no incluía el coste de desplazamiento y estadía por lo que se vieron forzados a buscar apoyo económico a través de una campaña de Crowfunding. Lo consiguieron y a partir de ese momento se consolidó un camino fructuoso en el que se sumaron más personas con ganas de crear.
Pero ‘Eye of Horus’ es mucho más que un invento genial para astronautas. Solo con la mirada una persona con problemas de movilidad podría llevar una silla de ruedas hacia sí o encender y apagar electrodomésticos. Ahora queda lanzarlo al mercado y definir las posibles salidas que puede tener.

‘Eyes of Horus’ es capaz de hacerte controlar objetos con la mirada
Con las mismas ganas, pero 100% solidario, está Ikaslbals, formada por profesores y estudiantes del CIFP Don Bosco de Guipúzcoa. En A principios de 2016 se daba a conocer en todo el país por haber creado la primera prótesis de brazo con una impresora 3D en España. Unai, de 9 años, recibía con ilusión su sueño y abría una puerta para que otros niños y adultos como él pudieran beneficiarse de esta tecnología. Ikaslabs es solo una parte de una organización mundial sin ánimo de lucro y fundada en Estados Unidos. Enabling The Future comparte a través de su web distintos diseños de prótesis de manos y brazos para que cualquiera con una impresora 3D pueda imprimirlos y ensamblarlos de manera independiente.

Unai recibe su prótesis de mano creada con una impresora 3D en España
Estos son algunos ejemplos de cómo el ingenio y las ganas pueden hacer la vida de muchas personas un poco mejor. Como decía Luis Martín Nuez este 19 de marzo en las charlas TEDx Zaragoza “hace falta creer para crear”.
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