‘Muerte a los grandes relatos’ como lucha contra la desigualdad

La casa de la mujer expone una colección que busca poner en valor el trabajo de las mujeres artistas, olvidadas por los discursos dominantes.

En octubre de 2016 el Museo El Prado quebraba 200 años de ostracismo para las mujeres artistas. Se exponían 15 obras de la pintora flamenca Clara Peeters que, de acuerdo a estudiosos, es una de las autoras de mayor calidad y relevancia junto a Sofonisba Anquissola. Este acto supuso un gran paso en la historia museográfica de España, pero también evidenció una realidad cuanto menos inquietante: el silencio y la infravaloración no son circunstancias extrañas para las mujeres que se han dedicado al arte.

De las 7.941 pinturas que posee el Museo El Prado, 57 fueron creadas por mujeres (un 0,7% del total), en datos cedidos por la propia institución. En el Reina Sofía la situación se mantiene, allí las féminas poseen el 5,5% de toda la colección (56 de 1.022).

De las 1120 obras que se expusieron en diciembre de 2016, apenas 7 tenían por firma nombre de mujer.

¿Por qué las producciones artísticas de mujeres apenas rozan un 0,7% del total? ¿Realmente es así?

La historia del arte ha estado liderada por hombres, mientras que las mujeres ha trascendido en su mayoría como meros atributos, estáticas e inmutables, expuestas para el deleite y consumo de, en este caso, las miradas que se posan sobre ellas. Una realidad que refuerza la violencia simbólica ejercida por los grandes relatos sobre la historia de la humanidad.

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La falta de igualdad en condiciones propicia que hoy gran parte de las mujeres no tengan nombre propio en las creaciones artísticas, salvo contadas excepciones. Como señala la historiadora del arte Patria Mayayo, en la Royal Academy de Londres no fue hasta 1893 cuando las “damas” pudieron asistir a las clases de dibujo del desnudo. Incluso, después de esa fecha se seguía restringiendo la entrada a las estudiantes, excepto si el modelo se encontraba “parcialmente vestido”.

Contra la invisibilidad de referentes en femenino nace ‘Muerte a los grandes relatos’, una exposición comisariada por María Bastarós y Alvaro Arbaje. Juntos tuvieron la oportunidad de mostrar un trabajo colectivo de más de 50 artistas en la Casa de la Mujer de Zaragoza durante el mes de marzo con motivo del Día Internacional de la Mujer Trabajadora.

La exposición es fruto de un movimiento valiente a la par que descarnado. Bajo el nombre ‘¿Quien coño es?’ la plataforma cultural feminista impulsada en 2015 por Bastarós aflora la necesidad de poner en valor a las referentes femeninas en el arte, así como en todas las ramas de las producciones culturales.

La falta de mujeres artistas en los discursos museográficos supone mucho más que una vulneración a la Ley de Igualdad, es también la construcción de la memoria e identidad de la sociedad a través de la superioridad del hombre sobre las mujeres.

-“Como hombre creo que es importante que se visibilice que nosotros también tenemos mucho que aportar en el feminismo”. -declaró Álvaro Arbaje durante el estreno – Añadió que también se debería trabajar el feminismo enfocado desde los hombres y “romper con el mensaje de que es solo cuestión de mujeres”.

Carrie Mae Weems, Juana Francés, Lia García o Ana Mendieta son algunos de los nombres que destaca la exposición, autoras de toda raza y condición que gracias a este proyecto buscan exhibirse en espacios más allá de los entornos puramente femeninos y reducidos.

Para María Bastarós el problema de la falta de confianza a las luchas feministas se debe al receptor que se niega a darle la entidad y la sensibilidad que merece la causa y la trata como si fuera agresiva “cuando no es más que la reivindicación de los derechos de las mujeres y la igualdad de condiciones”.

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Bastarós reafirmó que “es necesario hacer lecturas diferentes del arte y no centrar siempre la atención en la figura del hombre blanco de clase media alta”, para visibilizar historias olvidadas de identidades alejadas a lo ortodoxo. “Es pernicioso que exista un relato canónico oficial para la historia del arte y para cualquier otra historia ya que limita nuestro conocimiento sobre cualquier fenómeno”- subrayó.

‘¿Quien coño es?’ es una plataforma cultural feminista creada en mayo de 2015  por la historiadora del arte María Bastarós. En sus inicios empezó como una campaña urbana de pegada de carteles en la Universidad de Zaragoza para visibilizar a mujeres artísticas tanto a nivel historiográfico como contemporáneo. Gracias a esta campaña la plataforma alcanzó éxito a nivel nacional e internacional. Ahora su objetivo está en llevar todas estas intenciones al terreno expositivo.

 

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